viernes, 13 de enero de 2012


Curtiss HAWK, el primer Caza de la FAN y del Grupo de Aviación Nº 1


por Sergio Pulgar


Antecedentes

En medio de la crisis del sistema parlamentario, que no sería solucionada por la nueva Constitución de 1925, el país seguía arrastrando el insoluto tema de los límites con Perú, mientras Arica y Tacna (administrativamente chilenas) vivían en una suerte de binacionalidad.

Recordemos que la zona de Tarapacá fue anexada por Chile, luego de su victoria en la Guerra del Pacífico (1879-1884), contra Bolivia y Perú. 

Como se ha estilado en esta nueva concepción geopolítica, los perdedores intentan revertir los resultados bélicos, con incesantes campañas diplomáticas, en función de recuperar territorios perdidos en el campo de batalla. El sentido común dice que debería ser al revés, pero ...

Así las cosas, no se había avanzado y Chile descansaba en los laureles de la victoria, aunque, tanto Alessandri (Arturo), como su Ministro Ibáñez, tenían ideas bastante claras de cómo solucionar el tema, sin tener que enfrentar un conflicto, que, a todas luces, sería una aberración, dadas las condiciones económicas en que se encontraba el país, lo cual obligaba a orientar los escasos recursos en objetivos más beneficiosos para la desmedrada población.

Hasta 1926, sólo el Ejército y la Armada sostenían presencialmente el sistema disuasivo en el norte del país, más con mística que con medios, en tanto, los perdedores reconstruían sus fuerzas armadas, sin ninguna consideración hacia el bienestar de sus conciudadanos. Tanto Perú, como Bolivia, habían incrementado sostenidamente los gastos en armamento, al punto de que los altiplánicos lograron tener uno de los sistemas más modernos y actualizados en materia de recursos bélicos.

Chile, por su parte, desarrollaba ese nuevo Servicio Aéreo, ante el conservadurismo de las élites militares y navales, que con malos ojos veían como se iba perfilando y asentando ese nuevo sistema bélico.

Con más audacia que tecnología, los aviadores incorporaban las tácticas a sus operaciones y habían logrado la adquisición de aviones armados, aunque todos concentrados en la legendaria Base Aérea de El Bosque, desde donde se desplazaban hacia el sur y el norte.
Además de los "raids" de instrucción y de apoyo a la artillería, se estaban desarrollando los "raids de largo aliento", de acuerdo a una Directiva de 1925.
Aunque logrados, la nula existencia de un sistema de comunicación y de servicios de apoyo terrestre, menos aeródromos que pudiesen reconocerse como tales, se desplegaban hacia el norte, en la idea de presentar un nuevo obstáculo a las eventuales amenazas bélicas de sus vecinos.

Nace el Grupo de Aviación Nº 1

Administrativamente se había creado el 03 de Marzo de 1926, el Grupo Mixto de Aviación Nº 1, en El Bosque, pero con la clara idea de que tuviese su Base de operaciones en el extremo norte del país. De hecho se había nombrado Comandante del Grupo al Capitán Armando Castro, quien fue comisionado para elegir el lugar  donde establecería esta primera Unidad de Aviación. 
Primero se eligió Salar del Carmen, en Antofagasta, pero el objetivo era que estuviese lo más cercano al límite norte, pero suficientemente lejos, como para no aumentar las fricciones con los vecinos.
Así se determina que será en Alto Hospicio, al Este de la ciudad de Iquique, donde se iniciarán los trabajos de implementación de este Grupo. El paso de una vía férrea aseguraba el apoyo necesario, pero faltaba todo lo demás ...


El vencedor del combate de El Bosque


A mediados de Junio de 1926, dos aeronaves esperaban ser presentadas al entonces Ministro de Guerra, Carlos Ibáñez del Campo. se trataba del Dornier FALCKE y el Curtiss HAWK, el primero alemán y el segundo estadounidense.
La presentación tuvo lugar el 04 de Julio, sobre los campos de Lo Espejo, donde ambas aeronaves comandadas por Pilotos de trayectoria; el HAWK por James Doolittle, vencedor de la Copa Schneider de 1925 y Ernst von Schönebeck, ex miembro de la Escuadrilla Richtoffen, maniobraron los cazas notablemente, para finalmente trenzarse en un combate aire aire, novedoso en estos cielos chilenos, pero que impactó profundamente en los espectadores.
Finalmente y dadas las mejores condiciones de estabilidad en maniobras de alta resistencia, las autoridades decidieron la adquisición del Curtiss P-1B.
Así fue elegido el primer caza de la FAN y su primer destino fue el Grupo Mixto Nº 1, iniciando, de paso, la saga de aeronaves estadounidenses en Chile.


De los 09 HAWK adquiridos, 04 llegaron en 1927; en tanto los restantes arribaron en 1928, junto a 09 del modelo P-1C. Sólo ese año se trasladan definitivamente a la Base de "Los Cóndores", como ya se conocía la Unidad de Alto Hospicio.


Para albergar las modernas aeronaves de combate, se determinó la construcción de grandes hangares, que pronto se vería abigarrada de nuevos modelos, como los Curtiss O-1E FALCON incorporados en 1928.